Thursday, September 22, 2005

Sí, te quiero

Sí, te quiero y quisiera poder estar siempre a tu lado.
Sí, te quiero y nada me gustaría más que poder dormir cada noche entre tus brazos.
Sí, te quiero. ¿cuánto? No lo sé, porque me es imposible abarcar el sentimiento con palabras.
Que, ¿por qué te quiero? Por tus ojos, por tu sonrisa, por tu manera de ser y de tratar con amor a los niños.
Te quiero, pero sé que al menos por ahora no podemos estar juntos, qué más quisiera que verte cada semana, pero no siempre se puede.
Sin embargo, no por eso dejo de quererte.
Sí, te quiero y si tú me quisieras, sería yo la mujer más feliz sobre la faz de la Tierra.

Thursday, September 01, 2005

Ámame y Abrázame

Amame Abrazame
Que conste que el título de este escrito no es un imperativo lanzado al aire no’mas porque sí. Sino que esas dos palabras son el título de dos libros pequeños y llenos de sabiduría que recién volví a leer.
La premisa de Ámame es: “El amor es un dragón que baila al compás de un doble latido”, y a base de comparar un poco nuestras fantasías y nuestra ficción con dragones amistosos y con cara de bonachones nos vamos dando cuenta de que el amor se divide en tres esferas: el amor personal, el amor próximo y el amor total.
El amor personal es como decir “me amo a mí”, es reconocerme como una persona digna de ser amada, y quién mejor para amarme que yo misma, y a lo largo del tiempo me he dado cuenta de que amarme a mí es lo más difícil de lograr, porque quién mejor crítico de sí, que uno mismo, y la verdad cuando criticas tanto algo o alguien, es muy difícil amarlo, ¿o me equivoco?
El amor próximo es relativamente más fácil, es amar al otro, o a los otros, porque no habla precisamente de un amor romántico y de pareja, sino del amor entre hermanos, entre padres e hijos, entre amigos, ese amor que todos nos sentimos dispuestos a dar después de escuchar un rato a Julio Iglesias, o de tomarnos una cervecita para desinhibirnos, pero créanme que el amor próximo va más allá de sentirnos entonados para amar, porque es un hábito, una experiencia que vivimos cotidianamente o al menos deberíamos vivir de a diario. Amar al otro es tan sencillo como saludarle con una sonrisa al pasar, ya que la sonrisa es la llave más importante, la que abre más puertas y más corazones.
Y por último tenemos el amor total, el amor que nos hace sentirnos en comunión con el universo. Comunión podría dividirse en dos palabras: común y unión. Cuando todos nos unimos con un fin común, cuando todos nos decidimos a actuar con amor hacia todo lo que nos rodea, es cuando experimentamos el amor total. Me recuerda este tipo de amor al Santo de Asís, aquél que decía hermano lobo, hermano árbol, hermano río, hermana nube, hermana lluvia, hermana luna, aquél que se sentía uno con todos, y con El Todo, ojalá tuviéramos todos un poco de este Francisco.
Abrázame es un libro que desborda ternura y tanto éxito tuvo el primero que lanzaron después Abrázame 2. En este recorrido son unos osos trazados con pocas líneas pero muy expresivos los que nos van conduciendo por los diversos tipos de abrazo. Yo puedo abrazar y recibir abrazos todo el día, sin quitarle nada a nadie y por el contrario llenándome de calidez humana. Hay que distinguir los abrazos románticos de los que se dan por el simple hecho de haber comprobado en repetidas ocasiones que el apapacho es la mejor medicina.
Tipos de abrazos hay muchos, en forma de A, de sándwich, de corazón, de grupo, pero lo más importante del abrazo es la actitud que tenemos cuando lo damos y cuando lo recibimos.
Escuchaba hoy en la mañana una verdad indiscutible: una persona enferma puede sanar a base de apapachos y sin medicina, pero una persona enferma que tiene todos los medicamentos y cero apapachos, tardará mucho más tiempo en sanar, porque sentirnos abrazables, es sentir que somos valiosos, que inspiramos al otro un cariño tan grande que la mejor manera que encuentra para demostrarlo es abrir los brazos e invitarnos a refugiarnos entre ellos.
Ámame y abrázame, no son simples imperativos, son una invitación para acordarnos que un acto de amor nos trajo al mundo, pero que nuestra vida debe de construirse a base de muchos actos de amor realizados en el día a día.